Cuando el gobernador Doyle firmó el presupuesto estatal del 2009-2010 el 29 de junio, Wisconsin se hizo el 11er estado en la nación de proveer la matricula estatal para estudiantes indocumentados. La nueva póliza significa que estudiantes que viven en el estado de Wisconsin por lo menos tres años antes de graduarse de la preparatoria o de obtener su diploma equivalente (GED) serán elegibles para la matrícula estatal.
Esto representa importante progreso a nivel nacional para los derechos civiles de inmigrantes en educación. Desde el 1996 estudiantes indocumentados que aplicaron al sistema universitario público eran considerados como “estudiantes extranjeros” y tenían que pagar matrícula como si vivieran fuera del estado, sin importar cuanto tiempo hubieran vivido en los Estados Unidos. Entonces, aunque un estudiante indocumentado haya vivido casi toda su vida en Wisconsin, cumplido con todas las expectativas de sus maestros, y su familia haya contribuido con sus impuestos a la educación publica; prácticamente a la educación superior no estaba a su alcance por el alto costo.
A los oponentes de la matricula estatal les gusta argumentar que el estado está perdiendo dinero cuando proveen la matrícula estatal a estudiantes indocumentados, porque en su mundo imaginario, estos estudiantes están actualmente asistiendo a universidades y pagando la matrícula al costo del extranjero. Pero en realidad, al enfrentar el alto costo, muchos estudiantes inmigrantes no pueden asistir a la universidad.
Esta nueva ley representa un paso importante de avance porque trata a los estudiantes indocumentados en Wisconsin como una clase o grupo, y reconoce el valor de las contribuciones de estudiantes inmigrantes. También contribuye al progreso anterior, como la resolución de la mesa directiva del UW pasada en el 2004, introducida por Jesús Salas, el cual afirma la opción de la matrícula estatal para estudiantes indocumentados como individuales en el sistema universitario.
Este logro no hubiera sido posible si no fuera por la perseverancia de muchas personas. En particular, los estudiantes, incluyendo Students United for Immigrant Rights y Students United in the Struggle, un grupo estudiantil AfroAmericano de la preparatoria de Horlick que han luchado hombro a hombro con estudiantes inmigrantes en su esfuerzo para lograr la igualdad. Adentro del Capitolio, el representante estatal Pedro Colón ha encabezado este esfuerzo por muchos años.
La lucha sigue: Cartas de Manejar
Nuestra victoria ha sido agridulce, porque la Coalición Para Carreteras Seguras logró introducir el lenguaje para la tarjeta de conducir para inmigrantes. Exitosamente fue introducida al presupuesto estatal y pasó en la Asamblea pero fue vergonzosamente descarrillada en el senado por los esfuerzos del Senador Tim Carpenter.
Aunque la matrícula estatal logró ser reintroducida en el presupuesto estatal, las tarjetas de conducir no fueron incluidas. Los resultados fueron muy decepcionantes porque liderazgo Demócrata en el senado eligió el no mantener las tarjetas de conducir dentro del presupuesto, ignorando lo que era el interés público de proveer seguridad pública y un millón de dólares en ingresos, en un tiempo cuando el estado está descansando a trabajadores.
Considerando el nivel de apoyo impresionante para las tarjetas de conducir, incluyendo el sector de agricultura y la policía en el estado, la Coalición de Carreteras Seguras está planeando introducir una legislación para las tarjetas de conducir. Aparte, Voces de la Frontera está haciendo circular una petición con las firmas de votantes en el distrito del Senador Carpenter que apoyan las tarjetas de conducir. Les animamos a personas en la comunidad de ayudar con este esfuerzo importante.
En el 2009, nosotros logramos una de nuestras metas. Con su ayuda también lograremos las tarjetas de manejar y la legalización.